La crisis financiera que se originó en Estados Unidos parecía haber disminuido el martes, pero finalmente llegó con fuerza a Europa. La situación empeoró con la deriva de una entidad importante como Credit Suisse, lo que aumentó los temores de los inversores a un posible contagio tras el colapso de Silicon Valley Bank (SVB). Ahora, estos temores se han materializado en los mercados y se está ejerciendo presión sobre los supervisores y reguladores, debido al temor a que se repita una crisis bancaria a nivel mundial. Además, la crisis de Credit Suisse no solo ha sido causada por la fuga de los ricos, sino también por manejos cuestionables de su cúpula directiva.