El conflicto entre los países vecinos del este inicia en el año 2014, donde las tensiones entre Ucrania y Rusia se incrementaban por culpa de la invasión rusa a la península de Crimea, un hecho que provocó su anexo, además de conductas separatistas dentro del territorio ucraniano que provocó una guerra civil. No sería hasta el día 24 de febrero del año actual cuando el presidente ruso Vladímir Putin decide comenzar un conflicto armado que todavía a día de hoy sigue activo y que deja miles de muertes a sus espaldas y una situación económica crítica para Ucrania y devastadora para el resto de los países europeos.
Las consecuencias a nivel global de este hecho han sido en muchos casos demoledoras para innumerables empresas que poseían actividad empresarial en el territorio ucraniano y que dependían sobre todo de materias primas que exportaban estos, además de logística, tasas impositivas, etc. Desde el portal de empleo Jobatus ha llevado a cabo una investigación analizando un significante número de empresas registradas cuya parte de su actividad se registraba en los países del este y ha obtenido como resultado que el 73% de dichas empresas han cesado su actividad empresarial debido al conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, siendo la gran mayoría compañías de Latino América, las cuales exportaban productos como banana de ecuador, carne de Colombia, fertilizantes de Brasil o pan de molde mexicano entre otras.
Los efectos adversos del conflicto ruso ucraniano
De la misma manera que se pierde la oportunidad de negocio en los países del este por parte de muchas empresas a nivel comercial, las propias compañías que por cuestiones éticas finalizan relaciones con Rusia debido a ser el país invasor de manera ilegal, por lo que el gigante ruso ha cerrado la exportación de algunos productos como son el acero, el petróleo e incluso las vacunas Sputnik, factores que afectan a las empresas a largo plazo en cuanto a costes de compra y unidades disponibles.
A continuación os mostramos algunos puntos clave del conflicto bélico como consecuencia para los países y las empresas afectadas:
1- Inestabilidad financiera: debido a la escasez de recursos y la compra de bienes por parte de Ucrania y Rusia, se produce un aumento de precios, ascendiendo desde un 24% en productos de primera necesidad y alimentación hasta un 53% en petróleo, llegando hasta un aumento del 80% en luz y gas, derivado de la recesión de contratos de energía entre Alemania y las empresas rusas, algo que ha variado el índice de precios de consumo (IPC) en toda la unión europea.
2- La desconfianza en el gigante ruso: Tanto ha sido el trabajo realizado por los dirigentes rusos tras la caída de la Unión Soviética, cuyos esfuerzos por lavar la imagen y cambiar las relaciones de su país con Europa, que se ha visto truncada de nuevo por la operativa invasora de Putin que le ha devuelto una mala notoriedad y, por tanto, ha generado una gran desconfianza por parte de Europa hacia ellos. Los mercados caen un 62% a nivel financiero, ya que ha aumentado la prima de riesgo provocando así la salida de capital de muchas empresas afincadas en Rusia.
3- Un problema de inmigración y empleo: Son más de 3 millones de personas las que abandonan Ucrania huyendo de la guerra hacia países vecinos como Polonia, o incluso más lejanos como Alemania, suiza o países bajos, donde están acudiendo miles de ucranianos en busca de una nueva vida. Esto supone un considerable aumento de población y un problema de desempleo y pobreza, donde un 10,67% de las empresas de estos países han tenido que realizar esfuerzos para ayudar a estas personas, y siendo las empresas ucranianas las que un 94% han tenido que realizar despidos y ERTE en tiempo récord.
En conclusión, el conflicto armado entre Ucrania y Rusia supone una caída económica a nivel internacional, que repercute en gran medida a Europa, pero de la cual también los países de Latino América se ven afectados debido a la gran cantidad de bienes exportados a estos países, los cuales se han visto obligados al cese de su actividad empresarial, algo que de manera global, encarece el IPC de todos los países hasta que se encuentre una solución a dicho conflicto.